¿Qué es Comicodrama para mí?

Pues sí, hace tiempo que no escribo, y ahora que me da por hacerlo, me he planteado esta cuestión. Sí, porque seguro que el resto de los que escribe en este blog, o no se lo ha planteado o si se lo ha planteado no lo ha cavilado lo suficiente, o puede que el único que siente un cosquilleo cuando ve que unas cuantas personas de nuestro alrededor aprecian verdaderamente el trabajo y amor desplegados en estas palabras. Que aprecian, no nuestro trabajo únicamente (que no es en sí un trabajo, pero de alguna forma habré de llamarlo), sino que haya gente que piense igual que ellos y que sea capaz de transmitirlo de alguna u otra forma, como hacemos aquí.


Aunque está visto de antemano que todos los que publicamos aquí somos muy diferentes, hay algo que nos une: somos diferentes al resto. A pesar de que me parece haber dicho esto antes en alguna otra parte, nunca me habia dedicado a extenderlo y razonar sobre ello ampliamente.


Y pensaréis: "¿Dónde esta lo bueno de que todos seáis dispares?". Pues, a primera vista, que no somos soldaditos de plomo, todos iguales, dándonos la razón sin debate alguno, sin intercambios de ideas, sin aprender unos de otros... sin profundizar en lo que constituimos, como seres humanos que somos, en lo que nos rodea. Porque hoy día, todo el mundo busca a sus iguales, a individuos que no les lleven la contraria, que  les gusten cosas iguales a las suyas, que piensen lo mismo y que odien a las mismas personas. Dicho en otras palabras, que buscan amigos en un espejo.


Íbamos por... Sí, Cómico-drama. Huelga decir, que aunque la historia de este blog no es muy larga, ha pasado tiempos mejores, con más visitas y con una afluencia de entradas muy superior... Muchos dirán: "Cómico-drama se viene abajo". No amigos, Cómico-drama está en mi pecho, en mis manos, en mi cabeza, en mis ideas, en mis palabras... Porque éste, no es para mí un simple blog, representa algo más. Representa ese pequeño rincón donde venir a quitar el candado que anega mi alma y dejarla que fluya. Plasmar aquí si estoy enfadado, triste, indignado, feliz, enamorado, nostálgico o quiero reírme de alguien o de algo. Porque nadie me escucha mejor que mi teclado y porque si no fuera por él, no estaría yo aquí, soltando mi "rollo", ni habría conseguido muchas cosas... De modo, que si no fuera porque me he podido expresar y clarar escribiendo, no sería quien soy. Y estoy muy orgulloso de lo que soy y como soy, y sobre todo, estoy orgulloso de Cómico-drama.


Todos los que escribimos aquí, o por lo menos los que empezamos con el asunto del blog (Ricky, Brani, Samuel), coincidimos en que esta pagina ha tenido un éxito, cuanto menos, atronador comparado con los augurios que le teníamos. Así que esto es lo más cercano a lo que siente un padre cuando un hijo supera sus expectativas. Pues, Cómico-drama ha superado con creces las expectativas y ha roto moldes. Porque no me esperaba yo que a la gente le fuera a dar por leer tanto. Y siempre me había considerado de una "clase" en aras de ser destruida y que ya estaba avocada al fracaso y la desaparición. Pero este blog, me ha demostrado que aún hay gente ávida por aprender, disfrutar leyendo, compartir y volar un rato entre fantasías, o aclamar el nombre del que plasme aquí aquello que coincida con sus ideales o de enternecer su mirada leyendo alguna composición romántica o entrar en la misantropía al ver que cualquiera de nuestras críticas es pura realidad. Cuando veo a los que estamos aquí escribiendo o los blogs amigos que tenemos, de gente que también escribe y plasma sus ideas y sentimientos en las palabras; cuando veo las visitas y comentarios, o cuando alguien me dice: "Ey, Samu! Muy guapo lo que escribiste el otro día, me gusto mucho". Cuando pienso en alguna de esas cosas, de verdad que me asombro y me regocijo en el hecho de que no estoy tan "solo" como yo me imaginaba y que puede que sea verdad que aun no somos todos tontos.


¡Gracias Cómico-drama!