viernes, 11 de marzo de 2011

Inspiracion

Unos segundos tranquilos. Mirando la pared, perdido en los insondables abismos que ofrecen como retiro las imperfecciones presentes en cualquier superficie no uniforme, tersa, lisa. Rondando por mis recuerdos, por mis elucubraciones sobre el futuro. Maquinando planes, reflexionando sucesos. La luz de la inspiración, que de vez en cuando se marcha para desaparecer, aporta un candor, una sensación de energía e inquietud en mi pecho. No una inquietud mala. Una inquietud que me obliga a ir más allá, a merodear por cada resquicio de mi mente en busca de algo que me llene o que me altere, algo que me dé razones para ir corriendo en busca de un papel y un boli.

Revelaciones, podríamos llamarlo. Cuando estás haciendo cualquier cosa, el detalle más ínfimo puede hacer saltar la chispa. Gasolina en el cerebro... por lo que la enorme hoguera de la inspiracion ya está encendida, ahora solo queda hacer bien las escrituras con las brasas. Cada fuego tiene un combustible diferente, de ahí que no todas ardan con la misma intensidad ni con el mismo color de llama. Cada persona como es, cada estilo como su persona, su hoguera puede quemar, puede arder como el enorme poder y calor del tártaro. Y también el fuego puede ser una brisa fresca y reconfortante, que llene corazones y cierre heridas, que con un simple soplo llene tus pulmones de amor...

Bajar a tu corazón, rebuscar entre la inmundicia o las joyas. Sacar a relucir lo que más apremie y dejar, ya sea en el papel o en un teclado, cualquier cosa que te permita escribir, tus sentimientos, tu estilo, tu ira, tu rabia, tu amor, tu adoración.... Todo sea por no pegarle a nadie, ¿no? O puede que sea por no poderle decir a alguien que le necesitas. O tal vez sea por dibujar una sonrisa en el rostro de aquella persona que quieres... convertirte en un pintor y estampar una utopía. Igual puede ser para hacer llegar lenguas de fuego y rayos a la moral de aquel al que odias... para que el odio no te carcoma. Elevar también hasta las estrellas con miles de fábulas y metáforas, enamorar, puede que incluso con tus palabras puedas enseñar.

Y hablemos de cuando falta... falta esa sensación en mi pecho, la gasolina en mi cerebro. Miles de chispas a mi alrededor desaprovechadas... Se apoderan de mi las ansias de escribir algo. Lo único que hallo son frases incoherentes, contradictorias a un tema presentado anteriormente. Mi mente miles de veces echa pedazos en un segundo, pues se me viene abajo el mundo sin poder herir a los capullos, sin poder decir a quien quiero que es mi mundo. Y redundo en lo que sufro sin el amor del boli, sin el amor de la sensación en mi pecho. Me incita a gritar por cada esquina: "Vuelve inspiración, necesito usar mis musas". Ya... esas chispas, esas musas desaprovechadas... odio dejarlas tiradas, incluso cuando inspiración está, me cuesta dar avío a sus indicaciones. Una necesidad dar rienda suelta a ese sentimiento en mi pecho, si no está, hallarlo y meterlo ahí de nuevo. Porque vaciar mi corazón para dejar libre de pesos mi alma es una necesidad y no un capricho ni un hobby, es algo importante y serio, al margen de lo que muchos puedan pensar.

2 comentarios:

Natalia dijo...

Me gusta, y no hace falta que te diga que eres un genio. :)

CryptoQuid dijo...

No se si genio es precisamente la palabra. Solo lo hago lo mejor que se y con lo mejor que sale. Sacando desde lo mas profundo, como describe la entrada.

Se me da bien lo que a otros no. Puede que sea "distinto" y no un genio.

En cualquier caso agradezco el comentario, y como no, esa alta estima en la que me tienes querida Natalia.